ME COGÍ A TU NOVIA EN UN FERIA DE LIBRO

 

ME COGÍ A TU NOVIA ( EN UNA FERIA DE LIBRO) 


MANTRAS Y BARRAS POR EL LORD.


No subo fotos porque estar en un yate es común. Fumar sativa con kief es rutina. Estrenar joyería de oro es otro jueves. 

No tengo redes, porque Instagram me da igual.

Si hiciera reels pensarían que es I.A.

No me invites a tu conversatorio, no necesito que me etiquetes

Se me olvidó mandar obra para tu antología

Porfi, no me pidas que presente tu libro.

Solo tengo tiempo para el papel, con una libreta y una pluma me basta. Vuelvo a construir el emporio desde el suelo, poetas levanten sus cartas, es hora del du du du duelo.


Seguí al conejo a la colonia Maravillas

Número tres cero el timbre no servía, toqué la puerta y observé por la mirilla

Pavorreales albinas

Y blancas telarañas enmarcadas
En las ventanas con enredaderas.

Llegabas con tu novio y dos rayas

¿Quieres? —No gracias.

Me basta con el dragón en la mejilla

Completamente despejado

El recorrido a las salinas

Inmaculable azufre, si regresara a la tierra sería como esta arcilla.

¿Dónde estuviste Svarti?

—Cambiando las sábanas

Caldeando los huesos

Preparando el mise en place 

Cambio de balatas y vas para atrás.

Los artistas que admiras 

Te contaron mentiras

Pero está bien.

Tú no revelaste cómo te sentías.


Lord de nuevo salió al juego más pacheco que José Luis, quien librando batallas desiertas en esto devino.

El cuervo con capa se digna a bajar del castillo

La espada en tus hombros, no se te olvide

besar el anillo.


Trato de escribir sobre otra cosa que no sea vino

Pero paso tanto tiempo en La Toscana

Que cambiaron la tinta por tinto.


Uno nunca alcanza a escucharse porque está demasiado alejado de la antena y muy cerca del transmisor. Mi prana la inhalo de un porro a babor. Visito el Manhattan de los Etruscos de invasor, listo para humear las torres acompañado de un tal Iván. 

Moro, el dolor de perder el dolor
Si no soy mejor que Tonatiuh

Haré más números con mis libros que Baldor.


Aprieto los dedos chuecos en consecuencia

Desgranando en un cuenco

Pedazos de rubí y elocuencia, mi fiebre de verano aprender las tres pes:

Práctica, paciencia y presencia.

Esto no es una recámara, es una cámara de ecos

Los ojos tercos, fijados en el techo

Un cuervo tuerto regresando la mirada

Aquí vamos de nuevo, episodio infinito y medio.

Ya no me pregunto si me lo merezco, abro garganta y me lo trago lo paso

Ingerido está dentro de mí, donde antes no cabía la paz

Ni entraba nada. 


Svarti el veterinario que le quita la rabia a estos perros poetas.

Las cigarras desgarran sus guitarras eléctricas

Se echan un solo de mentiras con proeza.

Pero, ¿Cómo le ganas al que no entró a la convo? Sería un error.

Si tus habilidades con las letras se comparan, serías como Raygon o peor. 


Inquietantes cortadas en mis callos, por no usar dedales al pizcar

Todos los libros que he pasado mano a mano

Un día en un festival y otro en un bazar.

Traigo copal para limpiar los centavos, y mezcal de Matatlán para purificar los gusanos.

No lo hago por el Nobel, lo hago por CVA. 

Lo hago por las cabezas sanas, que nomás escriben porque tienen manos.


Extravagancia

Todo un sueño

Oh sí, (suu)

Y es una nueva celebración de esta onda que traigo

Vivir mejor (tomar Merlot)

Evolucionar esta vida de editor

Si yo fuera un Dinosaurio 

Sería un Publicasaurio.

Oh, ¡los gumaros! (como en la película)

Vienen contra mí

Tocados por el sistema editorial

Con confianza, me tuve que bañar por años (suu)

Conozco el sentimiento de sentirse atrapado

Entre murallas que he construido

Páginas con renglones, llenas hasta el infinito (sí)


Tipo, literal, mi mamacita está bien

Tipo no te creo que el valle de al lado sea real

Té espumoso acompañado de chicharrón de pescado

Sobre una cama de frijoles charros.

Mi contadora es mi óbice,  mis cicatrices sanaron

¿Por qué Odín me bendice? No lo entiendo.

Enseñando y sonriendo, aprendiendo y contando

Acomodando noventa y nueve libros que uso como cama roncando.

Hmm hmm 


Dime desde dónde partes, yo partí desde la Antártida

Y mis pasos traen nieve y arena

En la suela

Con una carry-on

Platicando de Carrión

Solo diecisiete y ya había escrito un libro, fácil.

Ya platicabas en la prepa de mis fanzines.

Yo solo escribo para CVA, para que vean un párrafo sangrón

Para que me cancelen en la hora feliz de margaritas dentro del Sanborn’s.


Si te contara todas las cosas culeras que hice durmiendo perros.

Y si tuviera una gordita de chales directo de Celaya. O si me hubiera aventado al metro Salto del agua para evaporarme en el tren de las diez de la mañana. Sí tan solo hubiera escogido Squirtle sobre Charmander, o me hubiera dado color que el alunizaje era falso, ¡No, si hubiera entendido que nunca iba a salir secuela de Coapa Heights! Solo así te podría contar las cosas culeras que el narco le hizo a mi familia. Solo así podrías aceptar lo dormidos que están mis perros.


Sigues creando habitaciones para tus escrituras, mientras mis libros son mansiones

No escarmiento, todo para mis personajes, todo para mis editores.

Me gasto dos semanas en Cartagena y tú novia le da like en MAPS a mis reseñas.

Me paso diciembre organizando una feria de libro y en mi mesa solo quedan esquelas.

¿Y si Pablo era raro con las chavas? Mejor de lejos

Soy el señor Torrance vendiendo mi alma por un trago enfrente del espejo. 

Tú editor te dijo que tus poemas se iban a vender pero ¿y si miente?

Lo único literario de tu carrera es tu agente.
Mientras yo, hotel cinco estrellas para el encuentro independiente.
Igual que Teroba la escritura me secunda, pero el billete va enfrente.

Levantemos las manos y ajustemos nuestro cinturones para el Lord.

Otra vez en un avión robando botellitas de licor siendo abstemio

En Barcelona Pacquiao quedó en la lona, Monterroso me inflama si no es senza lattosio, Mónaco me recuerda a tú novia por lo mona y a ti por lo naco.

Mis cuervos saben del papel solo para malgastarlo

Demasiado dinero en impresión, mi contadora me pidió hacer un libro de gastos.

Otras cien lagartijas y me subo a leer estos poemas.


La amenaza editorial fantasma ha regresado.



Me cogí a tú novia en una feria de libro

Mientras recogías tu mesa, te tardaste un chingo

Porque no vendiste ni un triste separador.
Tú novia, el sistema editorial, a la que le aceptas sus migajas

Ya van varias veces que tú novia me busca

Y yo estoy
en un mejor lugar

Y ella me insiste

¿pero yo? estoico.


No volví a ver a mi padre más que en cenizas

Y eran muchísimas, un costal completo de él 

También me mintió cuando dijo que había bajado de peso.

El engendro punk de un policía 

Tenía siete y me soltó el fuete, hijo apunta hacia las estrellas

Treinta y ocho años y sin chamacos
Sin deudas; solo dejaré polvo en la estela.


Los cuervos no cantamos, graznamos con dolor hacia el Valhalla.

Todos los vecinos me escuchan al Alba

Joven ave negra desplegando sus alas, me halagas

Despegaba por CVA, con barras y agallas. 

Supurando sangre de mis tatuajes, 

Hago libros por el gaje, corto mis venas con suaje, alimento mi alma con agave, ya dale, el cuervo con traje, el sistema editorial fue solo un faje, mis fanzines de garage, diez años de ediciones salvajes, diez siglos más volando en piloto automático, serán un pasaje.


Quemando tantas hojas como Alexandria, esto es un ultraje


No te preocupes por los artistas ni por la beca, Svarti liquidó su tiraje.


L.S.



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